Mi salida del closet

Tuve la oportunidad de nacer en un país donde el machismo y sobre todo el feminismo abundan, mi familia es la típica familia venezolana donde quien pone las reglas en la casa es la mujer, teníamos una matrona, mi abuela. Para mi sentir deseos a personas de mi mismo sexo era una enfermedad y que debía ser tratada. Desde pequeño ya tenía mi inclinación bien clara y creo que mi mama (madre soltera) sabía lo que ocurría, pero no se  lo había dicho, tú sabes lo que dicen “las madres saben en que andan metido sus hijos”, estuve en tratamientos psicológicos y terapeutas, pero no era una enfermedad, por lo tanto no tenia cura.

Durante toda mi infancia fui el menor de nueve primos, el único que no tenía hermanos, uno de los más pequeños, la victima del bullying. Mi infancia y mi adolescencia se desarrollaron en ámbitos parecidos, entre los estudios y el deporte, apenas tenía tiempo para jugar con mis primos.

Cuando entro al nivel de bachillerato mi gusto por los varones se incrementaba más, pues ya estaba en la etapa del desarrollo, me atraían los del equipo de futbol y los de artes marciales, para ese entonces yo era del equipo de atletismo. Pero no es hasta entrar a la universidad que tengo mi primera experiencia homosexual, tanto sexual como de novios, para mí fue encontrarme conmigo mismo, era lo que realmente me gustaba, ya había tenido experiencias heterosexuales, pero besar y tocar a un hombre era lo que me llenaba. Ese deseo no podía expresarlo con nadie, era deportista, miembro de la familia más machista y feminista del mundo, habían corrido a una prima solo por tener un novio a los 15 años, imagínate que podrían hacerme, si se enteraban que era gay.

Durante muchos años vivía en el armario, era constantemente un problema con mi pareja porque ya él había tomado la decisión de salir del closet, ya se sentía libre. Pero yo no podía hacer eso, de hecho hubo un día que mi abuela me dijo esto: “Si usted es un hombre dañado, agarre sus cosas y se va de la casa”, tenía tan solo 14 años cuando me lo dijo, no era lo suficientemente maduro como para tomar las riendas de mi vida, ni siquiera trabajaba para mantenerme, estaba tan concentrado en mi deporte y en mis estudios que ni pasaba por mi mente trabajar.

Era difícil concentrarme entre mantener mi “heterosexualidad” con mi familia y mi verdadero yo con mi pareja, quien decidió dejarme porque ya no aguantaba mi situación. Él debió entender que no solo se trataba de mi familia, sino también de la sociedad donde nacimos, ellos iban a ser más duro con nosotros.

A la edad de 30 años, y después de vivir muchas experiencias, y de tener por muchos años una doble vida, decido salir del closet y lo hice de una manera no tan común, decido abrir este blog, decido expresar mi sentir, ser verdaderamente quien soy sin importar mi familia y la bendita sociedad, al final es mi vida y solo yo decido como vivirla, no fue fácil tomar la decisión, pero ahora que estoy verdaderamente libre, fue la mejor que tome.

Ahora en mi vida están las personas que verdaderamente me quieren y me apoyan, aquellas que sin importar mi condición sexual solo me juzgaran por los actos que haga, esta es la vida que merecía tener desde hace mucho tiempo, pero por temor a muchas personas tome la decisión de no vivirla. A mi edad de 31 años, pienso que aun no es tarde y que ahora estoy dispuesto a vivirla a plenitud.






Dedicado aquellas personas que siempre me apoyarán, a ustedes muchas gracias

Comentarios

  1. Felicidades por tu excelente redaccion, similarmente e vivido muchas partes de tu historia en mi vida y hoy dia puedo afirmarte que estoy cansado de vivir por los paradigmas de esta sintetica sociedad… todos somos libres al nacer y tenemos el derecho de expresar nuestra humanidad y nuestros sentimientos asi como yo hoy comienzo a expresarte los mios hacia ti…

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