NO LE FUNCIONÓ
He decidido escribir este artículo puesto a que me paso hace algún
tiempo. Les cuento, resulta que hace ya unos cuantos días, me cortejaba un
caballero, lo etiquetaba como el Hombre
Perfecto, se le notaba que le gustaba mucho, le importaba mi Salud, mi
Vida, lo que hacía, donde estaba, si almorzaba o no, tu sabes, ese hombre
detallista que te va encantando poco a poco. Bueno, tras mucho tiempo
hablándonos, texteandonos, escribiéndonos decidí darle la oportunidad, y acepte
ir a una cita.
Lo cotidiano, fuimos al cine, conversamos, nos reímos, nos conocimos y
pues, la pasamos genial; luego de unas cuantas citas, llego el día de mi
cumpleaños, decido pasarla con él e irme a tomar unos tragos. Durante toda la
noche note como me miraba con ojos de deseo, no dejaba de rozar sus manos por
mis rodillas, he incluso par de veces toco mi pierna y la apretó, tu sabes cómo
es eso, de seguro te lo han hecho. Bueno, me desvié lo siento; tras unos
cuantos tragos de Ron, y una deliciosa comida, era hora de decirle que quería
hacer, y como cumpleañero yo mandaba, le
dije que quería estar a solas con él, y por supuesto acepto. Terminamos de
tomarnos el trago, pedimos uno para el camino, cancelamos la cuenta y nos
dirigimos a su carro, ya sentados se me viene encima y comienza a besarme con
locura, yo en medio de mi subida de alcohol le respondo, nos separamos y le
dije que nos fuéramos de allí.
Me aseguro que no había ido a hoteles en la ciudad (obvio que no le creí),
y que no sabía de eso, que yo como cumpleañero debía decidir, así que, le dije
el nombre de un Hotel y enseguida nos dirigimos hacia él. Llegamos y nos
asignan la habitación 362, Jamás se me olvidara ese número ya sabrán porque, al
abrir la puerta de la recamara comienza a sujetarme por la cintura, me voltea y
empieza a besarme nuevamente como lo hizo en el auto, le respondo aun con mas
éxtasis, me lanza hacia la cama y se da vuelta para cerrar la puerta, se me
viene encima y sigue besándome entre lo que me dice, que no se creía que me tenía
allí, que él siempre me miraba en el Gym y me deseaba con locura, que cada vez
que me veía sufría una erección, y seguía besándome y besándome.
Ya totalmente desnudos en la cama, veo que él no reacciona, y por más que
lo veía excitado por la manera de besarme, su
miembro no respondía, trataba de ayudarlo y aun así no lo conseguía. Por un
momento me frustre y pensé en que no era lo suficientemente atractivo para él,
porque no causaba la sensación necesaria para provocar su erección. Pero el
aseguraba que si y lo demostraba por su forma de tocarme, decido levantarme y
preguntarle que si era la primera vez
que eso pasaba, y para sorpresa me dijo que sí, pero que no entendía el por
qué, que yo le gustaba mucho, que le encantaba, que moría por estar conmigo,
pero que no entendía por qué su miembro no respondía. De la frustración solo decidí
levantarme colocarme el bóxer y encender un cigarrillo, sentarme en la butaca
de la peinadora y observar como el tendido en la cama no fue capaz de responderme.
Te pregunto, ¿Será que el culpable
soy yo? ¿Será que los Nervios por estar con la persona que él más deseaba lo
traicionaron? ¿Será que sufre de problemas de erección y no me lo quiso decir?
O tal vez ¿Será que no soy lo
suficientemente excitante para él?
¿Seré el único a quien le ha pasado
eso?
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